¿Logopeda? ¿El de la erre?, creerme, horror es ser logopeda y aun seguir escuchando estas preguntas, y es que aunque la logopedia es un ciencia que cada vez es más reconocida por la sociedad, aún hay muchas personas que desconocen nuestro campo de actuación o se asombran cuando les derivan a nosotras. Por ello, y porque la próxima semana, el 6de Marzo, se celebra el Día Internacional de la Logopedia, esa gran desconocida, Alba Romero, nuestra logopeda, te ofrece 8 razones para acudir al logopeda.
- Si tu hijo/a tiene dos años y dice menos de 50 palabras.
Aunque cada niños/a es un mundo, numerosos estudios confirman que a la edad de dos años un niño/a tiene que tener ya un repertorio de 50 palabras y realizar frases de al menos dos palabras del tipo, “mamá agua”. Por ello si a esta edad el/la peque de la casa aun se hace entender señalando objetos, no muestra interés en comunicarse o simplemente utiliza un habla que solo le entendéis las personas cercanas… lo mejor será que acudáis a un logopeda cuanto antes para que os de ciertas orientaciones de cómo actuar.
- Si tu hijo/a de 3 años solo toma biberón y papillas.
El miedo a los atragantamientos, lo fácil y rápido que es dar un biberón y el poco tiempo que tienen las familias en las horas de las comidas, son las razones por las que se retrasa la ingesta de alimentos sólidos en los más pequeños/as de la casa. ¿Y esto en qué deriva?, en posteriores problemas de alimentación y en alteraciones en el desarrollo anatómico de la boca y dientes, lo que puede acarrear problemas en la respiración, en la deglución y en la articulación. Lo que al principio puede parecer una ventaja a la larga no lo es tanto. Por ello, como ya os hemos recomendado en varios artículos, a partir de los 6meses… ¡todo el mundo a masticar!, Los niños/as a esa edad ya están preparados para ello.
- Si tu hijo/a tiene ya 6 años y pronuncia mal algún sonido.
Aquí hablamos de nuestra famosa “erre”, pero no solo de ella, sino que hay numerosos sonidos como la “s”, los grupos “pr, tr, br…” que son difíciles de articular para muchos niños/as. ¡Pero atención! a los 6 años todos los sonidos tienen que estar ya bien pronunciados, por ello si tu hijo/a ya ha cumplido esta edad y aun hay algún sonido que se le atasque, acude a un logopeda, una valoración a tiempo puede solucionar posteriores problemas, dado que las dificultades en el habla también se trasladan a la lectura y escritura.
- Si tu hijo/a de 8 años sustituye letras, las invierte o las omite al leer o escribir.
En el primer y segundo curso de primaria, es normal que los niños/as confundan aun alguna letra, las sustituyan por otras, lean “le” en vez de “el”, o cometan faltas de ortografía. Aún no son alumnos/as aventajados en el mundo de la lectura y escritura y poco a poco irán corrigiendo estos errores. Pero si estos se mantienen en el tiempo, pasan los cursos y siguen sin corregirse, es bueno contar con la opinión del profesor/a y ver a qué se deben esas dificultades. Quizás un par de trucos por parte de un logopeda faciliten este proceso.
- Si tu hijo/a ronca por las noches y respira por la boca.
Lo de dormir con la boca abierta es muy común entre todas las personas, ya que nuestros músculos se relajan y la boca se entreabre, pero lo de roncar ya es cosa seria, pues significa que está respirando por la boca y que las cosas no funcionan como deberían. Si a ello le sumas que tu hijo/a pasa el día con la boca abierta, ya son varios síntomas para poder pensar en un Síndrome de Respirador Oral, ¿Consecuencias? Además de dificultades en la respiración y falta de descanso físico, también se obtendrán mal oclusiones dentales, problemas en la articulación de sonidos, incluso de alimentación.
- Si escuchas de forma frecuente la voz de tu hijo/a ronca (disfónica).
Que vuelva sin voz de una excursión o de un cumpleaños puede ser justificable, aunque desde un punto profesional veamos ya algún fallo, pero que esta ronquera (disfonía) perdure durante una semana y cada vez sea más habitual que se produzca, ya no es tan justificable. Si esto ocurre, pedir valoración a un otorrino o foniatra es la mejor opción, pues a la larga podemos encontrarnos con una lesión en las cuerdas vocales de nuestros hijos/as.
- Si tu hijo/a empuja con la lengua los dientes al tragar o tiene una mordida abierta.
¿Mordida abierta?, ¿Deglución atípica?, si esto te suena a chino, te lo explicamos así de fácil. En muchas ocasiones los niños/as al tragar en vez de colocar la punta de la lengua arriba en el paladar, empujan con esta los dientes hacia delante, ocasionando una mala oclusión dental, de tal forma que al cerrar la boca queda un hueco entre los incisivos superiores e inferiores. Esto puede deberse a uso prolongado de chupetes, biberones o al chupar el dedo. Pide opinión a tu odontólogo y él valorará si tu hijo/a se encuentra en esta situación. Y si es así os derivará a un logopeda especializado en Terapia Miofuncional como nosotras en Ayudarte.
- Si tu hijo/a con 3 años comienza a tartamudear.
Este es un tema que ya hemos tocado en varios de nuestros artículos, entre los 2 y 5 años es común que los niños/as tartamudeen, ya que su “maquinaria” a nivel neurológico no está preparada para todo lo que quieren decir, pero ¡ojo! No es razón para relajarse, sino para vigilar y hacer un seguimiento, ya que si estas dificultades persisten durante meses sería importante acudir a una valoración por parte de un logopeda.
Hoy te damos 8 razones, pero sin duda te podríamos dar muchas más por las que sería aconsejable que conocieras un poquito más de nuestra labor. Poner un logopeda en tu vida puede mejorar muchos aspectos de tu vida. Así que, anímate, pregunta y oriéntate en tus dudas, estamos aquí para ayudarte.