A menudo, llegan familias al estudio para que les orientemos sobre cómo poner límites en casa. Es algo que os suele bloquear, no sabéis por dónde empezar… y no me extraña porque es un tema complejo. Cuando llegáis de lo primero que os hablo es que NO es lo mismo establecer una consecuencia a un comportamiento que castigar un comportamiento. ¿Cuál es diferencia entre castigos y consecuencias?
No te pierdas el siguiente vídeo dónde te hablo de los castigos y las consecuencias:
Como no sabéis muy bien cómo hacerlo, lo que más vemos en sesiones es que soléis poner: Castigos improvisados y desproporcionados En muchas ocasiones, los castigos están influidos por:
- vuestro estado emocional de ese momento
- impulsividad, lo que hacen que sean desproporcionados y sean inasumibles. Así que acabáis por no cumplirlos.
Lo primero que quiero decirte es: AQUÍ no hay culpables, los niños/as no vienen con un manual de instrucciones debajo del brazo, nadie te ha enseñado a ser padre o madre, es un título que nos dan nada más nacen nuestros hijos/as pero nadie nos enseña. Así que… fuera culpas.
¿Qué diferencia hay entre castigos y consecuencias?
En las primeras sesiones, os suelo preguntas qué soléis hacer cuando vuestros peques hacen algo que no está bien (que esto también, habría que desaprenderlo porque… ¿qué es portarse bien?).
De esa primera sesión podemos sacar muchas conclusiones y entonces, os explico que, por lo general, estáis castigando, cuando lo que realmente queremos es establecer consecuencias a los comportamientos de nuestros hijos. Y entonces soléis decirne… “pero Nerea, si es lo mismo pero llamado de otra forma”. Pues dejadme deciros que… no. Y ahora voy a a hablar de algunas de las diferencias:
¿Qué son los castigos?
En primer lugar, lo que queremos por encima de todo es ser respetuosos con nuestro peque, porque somos su principal orientación, por lo que va a aprender de la forma en la que resolvemos conflictos. Los castigos NO son respetuosos con la infancia ya que generan miedo y desconfianza. En muchas ocasiones, incluso los establecemos delante de personas de confianza, de sus amigos… por lo que también estamos influyendo en el desarrollo de su autoestima de forma negativa.
Por otro lado, los castigos suelen ser improvisados. Por lo tanto, suelen estar influenciados por nuestras emociones, ya que no son pensados con antelación ni el niño sabe lo que ocurrirá si realiza determinadas conductas. Estos castigos siempre suelen ser variables.
Por ejemplo: mi hijo pega a otro en el parque, unos días me enfado, otros días intento hablar con él, otros le castigo sin tablet, otros le grito, otros me lo llevo a casa… pero nunca hay una coherencia y una lógica entre su conducta y lo que ocurre inmediatamente después.
Por último, la última diferencia que destacaría entre un castigo y una consecuencia es que: EL CASTIGO NO ES LÓGICO AL COMPORTAMIENTO DEL NIÑO. ¿Si ha pegado a otro niño, qué lógica y qué relación tiene que yo le castigue sin tablet?
¿Qué son las consecuencias?
Las consecuencias son aquello que ocurre debido a nuestros actos. Según la disciplina positiva son respetuosas con la infancia ya que son informadas de forma anticipada por lo que nuestro peque sabe qué ocurrirá después de realizar una conducta concreta o después de saltarse una norma ya establecida.
Para lograr esto es necesario que hayamos hablado y comentado con antelación qué límites no se pueden pasar, qué normas vamos a poner y qué consecuencias vamos a instaurar cuando no se cumplan. Lo ideal sería que primero lo hablara la familia y después se hablase con los peques. Estas consecuencias siempre serán LAS MISMAS, por lo tanto, son COHERENTES. Además, un requisito indispensable que deben tener es que sean lógicas al comportamiento del niño, por lo que siempre intentaremos que tengan relación con lo que ha hecho.
Por ejemplo: si tu peque ha jugado al balón en casa y ha roto un jarrón, tendrá que repararlo o comprar un nuevo.
Tipos de consecuencias
Podemos diferenciar dos tipos de consecuencias:
Naturales
Inmediatas y por lo tanto son aquellas en las que los adultos NO intervenimos. Por ejemplo: si no coloco mi ropa en el cesto de la ropa sucia la ropa no se lava.
Lógicas
Es una manera respetuosa de establecer límites con nuestros hijos. Deben ser anticipadas y coherentes. Por ejemplo: papá avisa de que solo podrán jugar 2 partidas a un juego en la tablet. Si esta norma no se cumple habrá una consecuencia (si es la primera vez que se da esta situación. La consecuencia será elegida entre todos después, si ya ha ocurrido en otras ocasiones ya sabríamos qué consecuencia hay si no respetamos esa norma).
Si quieres profundizar en el tema de los castigos y consecuencias, te recomiendo consejos para afrontar el mal comportamiento infantil , 10 signos de alarma que tienes que tener en cuenta para prevenir un comportamiento violento en casa y pasos para poner normas en casa.
¿Tienes dudas sobre los castigos y consecuencias? ¿Te parecen complicadas aplicar las consecuencias? Te resuelvo estas dudas en comentarios sobre los castigos y consecuencias.
