Aprender a gestionar esta situación de aislamiento por el coronavirus es un reto para todos y más cuando tienes que explicar el coronavirus a los más peques de la casa. Cada día hay nueva información que nos sigue sobresaltando y generando incertidumbre sobre qué va a pasar y hasta cuándo podrá durar esta situación.
En redes sociales, hay muchos vídeos con niños que se aburren, que se han dado cuenta que no son “vacaciones” y que están agobiados porque no pueden salir al parque como de costumbre. Todos tenemos alterada nuestra rutina, pero los más peques son los que más lo notan y probablemente te resulte difícil explicarles el coronavirus y esta situación a los más pequeños. Sobre todo, porque una semana le has dicho que iba a salir en breves y a la siguiente has cambiado de opinión. Por eso, Alba Romero, psicóloga y logopeda de Ayudarte te ofrece 3 claves comunicativas que no puedes olvidar si quieres enfocar la situación adecuadamente.
¿Cómo afecta a los niños el coronavirus y la situación de aislamiento?
Ser pequeños no implica no enterarse de las cosas que ocurren a nuestro alrededor, al revés, los niños y niñas a partir de los dos años, ya son conscientes de lo que ocurre, bien porque escuchan a las personas que le rodean hablar o porque ven que sus rutinas y conductas se han modificado.
Cuando estos niños y niñas son más mayores, ya ven información en redes sociales o en medios de comunicación y al igual que nosotros, se plantean preguntas y dudas sobre la situación que estamos viviendo.
Aun son inmaduros para utilizar un razonamiento crítico apropiado a la realidad, por lo que pueden generar ideas erróneas de lo que está ocurriendo, o simplemente no van a ser capaces de gestionar emocionalmente toda esta situación. Por lo que ahora más que nunca necesitan nuestra comprensión y nuestra información para disminuir esa inseguridad e incertidumbre que les genera no saber qué es lo que está pasando.
¿Cómo hablar con los niños sobre el coronavirus?
Siempre nos gusta dar importancia a la comunicación y más favorecer que esta sea efectiva, por ello, os facilitamos 3 recomendaciones comunicativas y psicológicas para explicar esta situación de nuestro día a día a los y las más pequeñas de nuestra casa.
1. Adopta una actitud tranquila y parte de lo que ya sabe tu hijo/a
Ante todo serenidad y calma. Comienza preguntando a tu hijo/a qué es lo que sabe. Esto nos permitirá partir de un punto y desmentir aquella información errónea que ronda su cabeza. Las emociones se contagian, así que demuestras ansiedad o miedo, ellos serán los primeros en captarlo.
2. Da información honesta, comprensible y adaptada a su edad.
Antes de los 10 años, los niños y niñas presentan limitaciones en el concepto de temporalidad y en la capacidad para recordar acontecimientos pasados, por lo que pueden ver la misma noticia varias veces repetida en la televisión y pensar que son noticias diferentes. También comprender las emociones de los demás es complejo para ellos. Por lo que intenta dar explicaciones concretas y sencillas. En la red hay un montón de recursos de cuentos, comics y juegos adaptados para niños, que nos facilitan este paso.
También, debemos responder con honestidad a todas sus preguntas, mostrándonos comprensibles a lo que dicen y poniéndonos en su lugar, no restando importancia a las preguntas que nos plantean porque para ellos/as son importantes.
3. Ofrecer alternativas a esta situación
Es importante, darles la oportunidad de que generen alternativas. ¿Qué podemos hacer ante esta situación? ¿Qué te gustaría hacer? El hecho de darles esta oportunidad hace disminuir su inseguridad y ansiedad. Por otro lado, les hace sentirse más valiosos/as. Además, podemos escuchar sus propuestas y de paso explicarles la importancia de evitar el contagio y de la importancia de permanecer en casa.
¿Cómo enfocas este tema con tu hijo/a?, ¿Cuál ha sido su reacción cuando le has explicado que tendrá que estar 15 días más en casa? Nos gustaría conocer cómo te ha ido y poder ayudarte, entendemos que la situación va cambiando día a día y que a veces por protegerles no sabemos qué hacer. Nadie está preparado para vivir una situación así, así que quizás entre todos podemos arrojar un poco de luz.