¿Cuántas veces has presenciado una escena de celos entre hermanos? ¿Alguna vez has tenido celos de los tuyos? ¿No sabes cómo gestionar los conflictos entre tus hijos? Si quieres conocer por qué nace esta emoción y cómo podemos fomentar que no haya celos entre hermanos… ¡sigue leyendo!

¿Qué son los celos?

Los celos son una emoción que aparece con la intención de mantener una relación afectiva. Los humanos somos seres sociales y, como tales, una de nuestras necesidades básicas es la relación con otras personas. En estas relaciones buscamos afecto y apoyo y los celos aparecen cuando creemos que puede peligrar que una persona nos de estas dos cosas. Al igual que no podemos elegir cuando estamos tristes o alegres, tampoco podemos elegir sentirnos celosos o no sentirnos. Lo que sí que podemos hacer es gestionar esta emoción y todo lo que la rodea para que no suponga un problema en nuestro día a día.

¿Es normal que mis hijos sientan celos?

Cuando la familia se amplia, es totalmente normal que aparezcan celos por parte del hermano mayor hacia el nuevo miembro de la familia. Hay que tener en cuenta que ve amenazada su necesidad de amor, afecto y atención y esto le puede producir mucho malestar. Por otra parte, también es normal que el pequeño de los hermanos presente conductas de celos, ya que, de la misma forma, está compitiendo con el otro por la atención de sus padres.

¿Cómo pueden manifestarse los celos entre hermanos?

Existen infinidad de conductas detrás de la emoción de celos. Las más comunes en niños suelen ser: llorar con frecuencia sin motivo, enfadarse o tener rabietas, conductas regresivas (hacerse pis o caca encima, no querer comer solo), insultar al otro, pegar o pellizcar a su hermano, desvalorizar al otro (“él no sabe hacer esto”, “no puede jugar porque es tonto y no sabe”), tratar de demostrar su valía (“mira que bien hago esto mamá”, “¿a que me quedó bien este dibujo papá?), imitar a su hermano para tratar de conseguir lo mismo que él, pueden somatizar los celos (dolores de barriga, de cabeza, cansancio, insomnio), exageración de algún malestar o problema, disminución en el rendimiento escolar, etc…

Consejos para gestionar los celos entre hermanos

trucos para mantener buena relación entre hermanos

No ignores la emoción.

Hay teorías que defienden que si ignoras los celos estos terminarán por desaparecer, ya que no estamos recompensándolos con atención, pero… si tu sintieras celos de tu pareja, se lo expresaras y te ignorara ¿dejarías de sentirlos? No, ¿verdad? Puede ser que no volvieras a comunicárselo, pero la emoción seguiría ahí creándote malestar. Por esto, no debemos ignorar a nuestro hijo cuando muestre celos si no que debemos validar su emoción y ayudarle.

Valida la emoción.

Es importante cuando vemos que se muestran conductas a raíz de los celos pararnos a hablar con ellos sobre esto. Tenemos que prestarles atención y normalizar ese sentimiento con palabras de afecto y apoyo. También debemos proponerle o pedirle que busque una solución, que se disculpe o arregle aquello que ha hecho por celos (si rompe algo, recogerlo; si ha insultado, pedir perdón). Por ejemplo, podemos decirle “es normal que sientas celos de que papá esté leyendo con tu hermano un cuento, pero está mal romper el libro, ¿qué te parece si vamos tu y yo a arreglarlo con celo?”. A veces, también puede utilizar libros y por eso tenemos esta propuesta sobre  libros para combatir los celos entre hermanos

No castigues ni les riñas por tener celos.

Como hemos dicho, es algo natural que les ayuda a prepararse para los conflictos futuros, con los cual debemos acompañar y guiar, pero no castigar.

No los compares.

Algo que vemos mucho en consulta es el hecho de comparar a los hermanos entre sí o comparar en general con otros niños. Esto lo único que hace es aumentar la rivalidad y no es justo para ellos, ya que todos tenemos puntos fuertes y débiles y no por ello somos peores.

No castigues uno prestándole más atención al otro.

Muchas veces creemos que es una buena solución excluir de un plan familiar a nuestro hijo por haberse portado mal. Pero esto lo que va causar es mucho malestar y que se sienta desplazado, aumentándose así los celos. Debemos buscar consecuencias justas y que se relacionen con la conducta que queremos eliminar, pero nunca negar tiempo en familia o afecto.

Dedica tiempo a solas con cada uno de ellos.

Puedes dedicar algún día para hacer algún plan solo con uno de ellos para que sienta, aún más, en ese momento lo especial que es para ti. Asegúrate de que el otro sabe que también tendrá su día o que realiza alguna actividad divertida con otro miembro de la familia.

Hacer actividades juntos en los que tengan que compartir la atención.

Intenta que sean ellos quien resuelvan los conflictos.

Por malo que a ti te pueda parecer que discutan, son una excelente oportunidad para que practiquen y vayan adquiriendo las habilidades sociales necesarias y la negociación que necesitarán en otras relaciones para solucionar conflictos, con el beneficio de que en estos casos tienen por seguro que en el ámbito familiar hay una cimentación de amor que no desaparecerá por un pequeño conflicto. Lo que sería más adecuado es simplemente observar y acompañar, pero nunca permitir la violencia, en ese caso podríamos intervenir y recordar la norma de que no se permite ese tipo de comportamiento en casa y que deberá solucionarse a través de la comunicación.

Demuéstrales afecto por igual.

En ocasiones hay uno de los hijos que tiene más dificultades y que nos centramos más en lo que no hace o en lo que no hace del todo bien, pero es importante cubrir esa necesidad de afecto con mimos, abrazos, besos y atención.

Refuerza lo positivo de cada uno.

Todos tenemos y hacemos cosas positivas a lo largo del día. Intenta expresar por igual a tus hijos las cosas buenas que tienen y no refuerces mucho a uno y poco al otro porque eso generará malestar.

¿Te ha quedado alguna duda sobre los celos? ¿Te gustaría compartir tu experiencia sobre los celos entre hermanos?Te leo en comentarios

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