Vacaciones-2¡Oh las vacaciones! Es una delicia para los niñ@s,¿verdad? Se levantan tarde, salen con los amigos al campo o a la playa, se dan chapuzones en la playa, se pasan tardes infinitas haciendo castillos de arena… ¡La buena vida! Muchos niñ@s se preguntan ¿Por qué no habrá vacaciones perpetuas y se cierran los coles para siempre? Así no tendrían que volver a clase ni levantarse temprano, ni desayunar de prisa y corriendo para no perder el bus, ni pasarse el día estudiando … Otra cuestión es para vosotros los padres, donde muchas veces el verano supone un doble esfuerzo y es difícil tener una rutina, dónde se intentan hacer los cuadernillos de verano o poner tareas y no siempre resulta fácil. Al igual que los niños, a los adultos también nos toca volver a empezar, así que para todos esos niñ@s y adultos que les cuesta volver al cole o al trabajo, …   Ayudarte ha decidido dejaros este maravilloso cuento para explicarles por qué es bueno ir a la escuela   En un país lejano hace muchos, muchísimos años, reinaba un soberano, Bonifacio el Risueño, que no era capaz de dictar una sola ley que pudiese hacer sufrir a sus vasallos. Así que todo lo que le pedían, Bonifacio decía que sí. Él fue el que creó la vacación de los jueves por la tarde, apenado de que la semana se hiciese tan larga para los estudiantes de su país: el País de la Felicidad. Con aquel descansillo a medio camino,la semana escolar se hacía más llevadera. Pero no todos estaban conforme con ello. Frivolín, un joven estudiante de aquel país, no creía suficiente aquel mediodía de vacación y convenció a todos los niños para que le acompañaran a pedir al rey el día entero para así poder salir de excursión, levantarse tarde…. El rey, viendo la ovación que desató el discurso de Frivolín, les otorgó el día entero a condición de que gritaran también: ¡Viva Bonifacio el Risueño! amor-blank   Pasó algún tiempo y la dicha más completa reinó en aquel país con dos días de vacación a la semana. Pero ahora resultaba que el jueves era un día más feliz que el domingo porque después del jueves solo había un día de clase… Era preciso igualar las dos partes y Frivolín acudió de nuevo a ver al rey para pedirle el lunes libre y Bonifacio volvió a concedérselo. Pero cómo podéis imaginar, pronto volverían a palacio para pedir por el martes y el viernes y siguieron yendo hasta que al final consiguieron que todos los días fueran fiesta. Y en vista de que los niños ya no iban al cole, se cerraron escuelas, instis y universidades.   ¡Fueron unos años de dicha memorable! Los niños no hacían más que jugar todo el santo día. Pero pasaron los años y lo que eran risas acabó siendo un aburrimiento total porque con tanto tiempo libre ya no sabían que hacer y encima el rey se puso enfermo y tuvieron que buscar un médico, pero en todo el país no había ni uno, así que tuvieron que traerlo de fuera y le recetó una medicina que traerla del extranjero porque no había farmacias, con lo que eso costaba! Pero cuando llegó la medicina, nadie sabía leer y no sabían que dosis ni cuando tenían que tomarla.   Total, que desafortunadamente, Bonifacio el Risueño se murió, y su hijo. Malburgo el Ceñudo, lo primero que hizo fue desterrar a Frivolín, por ser el causante de todo ese caos y lo segundo fue abrir todos los coles y universidades y sólo dar un día libre para descansar, aunque con todos los deberes que les ponían no había ni tiempo para jugar! Así que así paso de ser el País de la felicidad al de la Pena Negra, ya que el analfabetismo estaba castigado con Pena de muerte. De un extremo, se había saltado al otro… Y es que ningún extremo ha sido bueno nunca… Menos mal que ahora hay vacaciones de vez en cuando! 😉  ]]>

Pin It on Pinterest

Share This