Las matemáticas también son importantes en la etapa infantil ¿Por qué? Te preguntarás… Pues es en estas edades tempranas donde el niño/a aprende y comienza a interactuar con los números, desarrollando así su habilidad lógico-matemática. Las matemáticas son un lenguaje universal que nos permite comunicarnos, organizar nuestro cuerpo (una nariz, dos orejas) … y, por ello, el reconocimiento de los números es un aspecto clave a trabajar.
Debemos tener en cuenta que, aunque no lo percibamos, los números están constantemente en nuestro entorno: en los portales, en los coches, en los supermercados, en los cuentos… Por lo tanto, es algo que terminan relacionando pronto.
Y tú, te estarás preguntando… ¿yo cómo padre… cómo puedo trabajarlos en casa? Hoy Nerea Riveiro, pedagoga y autora del blog pedagoqué nos propone tres actividades en las que trabajaremos tanto el reconocimiento de los números como el conteo.
¿Qué tenemos que hacer? Lo ideal sería comenzar con una propuesta en la que nuestros peques vayan conociendo y descubriendo poco a poco cada número: lo cojan con sus manos, lo toquen, conozcan su forma… para posteriormente representarlo.
Muchos conoceréis las bandejas sensoriales de inspiración Montessori, hoy os voy a proponer una forma de hacerlo en casa. Solo necesitamos:
- Un recipiente bajo de cocina, como el de la foto.
- Pan rallado.
- Números de madera. En el caso de no estar pintados podréis hacerlo antes de comenzar la actividad y aprovechar ese momento para trabajar los colores.
Colocaremos el pan rallado dentro del recipiente y esconderemos los números de madera en él.
La idea es que el peque vaya descubriendo poco a poco los números. Una vez que hemos trabajado esto, podremos representar el número con las manos en el pan rallado, de forma que quede su silueta.
Para la segunda propuesta que os traigo necesitaremos:
- Números de madera.
- Depresores linguales o algún material que se le parezca y tengáis por casa.
- Pinzas pequeñas.
¿Cómo la llevaremos a cabo? Escogeremos objetos o comida que tengamos por casa, por ejemplo, garbanzos. Los colocaremos en un bol e iremos sacando tantos garbanzos como queramos del 1 al 10. El peque tendrá que ir colocando en los depresores tantas pinzas como garbanzos hayamos contado, eligiendo el número correcto. Es muy importante tener en cuenta que la primera vez que llevamos a cabo las actividades debemos ser guías en ellas e ir orientando a nuestros peques.
Por último, la siguiente actividad consiste en contar los corazones de diferentes colores: cuántos hay rojos, cuántos hay azules… y colocarlos en el número correspondiente. Así, además, estamos trabajando discriminación de colores.
¿Qué os parecen estas actividades? Recordad que los materiales siempre pueden ser objetos que tengamos por casa y que no hay que comprar nada para realizar las propuestas. ¡La imaginación es poder!
En ayudarte hacemos estimulación temprana y trabajamos todos estos contenidos de forma vivencial. ¿Qué te ha parecido?