El verano es un momento perfecto para superar los miedos que a veces durante el invierno no se nos presentan tanto o no tenemos tantas oportunidades para exponernos a esas situaciones que no aterran. Por eso, en el siguiente artículo te vamos a hablar de los miedos infantiles más comunes y algunas recomendaciones para poder ayudar a tu hijo/a.
Miedos infantiles más comunes que se presentan en el verano
La infancia es una etapa de inocencia, de primeras veces, de imaginación y de sentirse desprotegido e incomprendido en ciertos momentos. Por eso, te vamos a hablar de esos miedos que podemos ver más en consulta para ayudarte a que los entiendas un poco más y profundices en ellos. Evidentemente no se dan exclusivamente en el verano, pero sí que es cierto que en esta época en concreto es cuando más tienen que exponerse a ello:
Miedo a la arena
Este miedo no hace referencia a que tengan miedo a que la arena les vaya a atacar ni nada similar. Más bien está relacionada con que la arena queme o que no quieran ensuciarse.
Miedo a perderse
Es lógico que cuando vas a la playa en estos días de calor, a tu hijo le cueste despegarse de ti y este pendiente de no perderse. En el estudio muchos niños recuerdan con angustia el día en que se soltaron de sus padres y pasaron un rato solos y perdidos. Es importante que tenga precaución pero no que eso desemboque en un ataque de pánico.
Miedo al agua
A veces ese miedo sólo es especifico de mar (por las olas o por los animales marinos que hay) o piscina y otras es en ambos casos. Si no flotas o no sabes nadar, es lógico que tengas miedo a intentar aprender dónde ves que no haces pie o no controles la situación. Tener respeto y cautela es algo positivo, el miedo nos protege del peligro pero dejar de ser adaptativo cuando el ser precavido te paraliza hasta tal punto que domina tu verano y no te permite aprender a nadar. Por eso, lo mejor es ir adquiriendo seguridad uno mismo en zonas dónde se siente a gusto, quizás hay que empezar por una piscina inflable e ir aumentado el nivel.
Miedo a las insectos como las avispas o arañas
Nadie sabe lo que duele una picadura hasta que lo ha experimentado. Al principio los niños andan descalzos y más despreocupados hasta que lo sufren. En ese caso, toda precaución es poca. En el caso de las avispas, no se trata de correr cada vez que ves una, basta con mantener la calma.
Miedo a separarse de ti
Suele suceder cuando tiene que ir a un campamento o duerme fuera de casa. En ocasiones este miedo puede desembocar en un ataque de pánico o ansiedad por separación. No me detendré mucho en él porque ya hablamos de él hace un tiempo.
Miedo a explorar sitios desconocidos
Este miedo está muy unido al anterior, pero en este caso el miedo surge cuando tiene una gran dependencia de ti y aparece cuando le sacas de su rutina y ambiente.
Miedo a los sonidos fuertes como tormentas de verano o fuegos artificiales
¿A quién no le ha pasado que en plenas fiestas hay un niño que se tapa los oídos cuando escucha un fuego artificial? Tu hijo no es el único al que le pasa, muchos niños asocian los sonidos fuertes a peligro.
Miedo a hacer amigos
Si tiene problemas de habilidades sociales, enfrentarse solo a un campamento puede ser bastante difícil. Por eso, la mayoría buscan seguridad yendo con un amigo.
Cómo ayudar a tu hijo a superar sus miedos infantiles
Si te preguntas cómo apoyar a tu hijo en el proceso de enfrentar y superar sus miedos, aquí te comparto algunas estrategias efectivas:
1. Escucha y Empatiza: Es fundamental que no minimices los miedos de tu hijo. Dedica tiempo a hablar sobre sus temores, reconociendo lo que siente. Frases como “Entiendo que tengas miedo” o “Conozco a otros niños que también han sentido lo mismo” pueden ayudar a validar sus emociones.
2. Establece Retos Diarios: Crea un plan de desafíos pequeños que les permitan enfrentar esos miedos gradualmente. Establece pasos claros para abordar sus ansiedades: desde hablar con un padre, abrazar un peluche, distraerse con un juego, hasta pensar en una alternativa positiva.
3. Avanza Progresivamente: Es natural desear que los miedos se superen de inmediato, pero lo más efectivo es hacerlo de manera gradual. Permite que el proceso avance a su ritmo, asegurándote de que esté listo para cada paso.
4. Mantén una Actitud Relajada: No conviertas cada conversación en un análisis de sus miedos. Es importante hacer pequeños progresos semana a semana. Si en algún momento sientes que no están logrando avanzar, no dudes en buscar la ayuda de un profesional.
Recuerda que cada niño es diferente y lo más importante es ofrecerle tu apoyo incondicional mientras navega por sus miedos. Si quieres saber más, te recomiendo 5 Miedos relacionados con ir a terapia psicológica o Cómo superar los miedos en verano o Finales Felices: "Soy capaz de superar mis miedos
