Son muchos los niños y las niñas con dislexia que vienen a Ayudarte para trabajar con nosotras sobre esas dificultades. Por ello, cada vez vemos más y más ciertos mitos que siguen estando presentes, especialmente para las familias y hoy queremos hablar de ellos y que conozcáis porque estos mitos NO son reales.
Pero antes de empezar, vamos a recordar qué es la dislexia. Es una dificultad específica y PERMANENTE para adquirir o desarrollar la lectura y la escritura, es un trastorno del neurodesarrollo de origen neurobiológico, que implica que no aprendamos o dominemos la lectoescritura.
Te ponemos un vídeo sobre la dislexia para explicarte más en profundidad este tema:
Mitos sobre la dislexia
Para nosotras, desde la pedagogía, nos parece fundamental desenmascaras ciertos mitos para concienciar socialmente y divulgar sobre este trastorno basándonos en la evidencia científica. Es un paso fundamental para poder comprender a estos niños y a estas niñas que reciben el diagnóstico y por supuesto, para que las familias puedan identificar cómo ayudar a sus hijos/as. Así que ahora que ya sabes lo que es la dislexia, vamos a hablar de algunos mitos:
Escribir palabras en espejo determina dislexia.
Durante muchos años se ha vinculado la escritura en espejo con el diagnóstico de dislexia. Sin embargo, aunque puede ser un indicador del que tenemos que estar pendientes y observar, la escritura en espejo es considera normal hasta los 6 años, ya que la confusión de las grafías en edades tempranas es muy frecuente. La detección y el análisis de la dislexia debe ser mucho más profundo y debe cumplir una serie de criterios diagnósticos presentes en el DSM-V.
La dislexia no se evidencia antes de los 7 años.
Este mito es completamente FALSO. La detección temprana es fundamental para reducir el impacto de las dificultades, por lo que debemos estar muy atentos en la etapa de infantil para detectar posibles signos de alarma que indiquen que puede desarrollarse este trastorno del aprendizaje. Aunque sí es cierto, que el diagnóstico se realiza a partir de los 7 años, ya que es cuando desarrollamos los procesos lectoescritores. Pero siempre es importante realizar una detección temprana para aplicar programas de prevención que reduzcan el impacto de las dificultades observadas.
La dislexia se cura.
La dislexia es un trastorno del neurodesarrollo, por lo que, aunque implica diferentes grados de gravedad, no existe una cura. Un criterio imprescindible para el diagnóstico es que aquellas dificultades observadas sean persistentes a lo largo del tiempo a pesar de que exista una intervención directa en ellas. Si estas dificultades de lectoescritura son transitorias estaríamos hablando de retraso lectoescritor u otras dificultades relacionadas con la lectoescritura.
La dislexia se produce por un mal hábito lector.
En sesiones con las familias, uno de los comentarios que más se repite es el siguiente “claro… como no va a tener dislexia si apenas lee…”. Es muy común y hay que desterrar este mito por completo.
El hábito lector no tiene absolutamente ninguna relación con la aparición de este trastorno. Este trastorno se debe a muchas variables relacionadas con la predisposición genética, factores neurobiológicos, cognitivos y ambientales. Debemos evitar cargar de “culpa” a los niños y a las niñas que reciben este diagnóstico… ya que nada tiene que ver con algo que pudiésemos haber hecho para evitarlo o prevenirlo. En muchas ocasiones, esta rechazo por la lectura se ve precisamente influenciado por las dificultades que aparecen cuando leemos.
Si quieres saber más sobre la dislexia, déjalo en comentarios. Además te recomendamos los siguientes artículos sobre el tema que pueden resultarte interesarte sobre la dislexia: Actividad para trabajar conciencia fonológica infantil y dislexia en casa, mitos comunes sobre la dislexia , mitos sobre la dislexia que no ayudan a tu hijo y Y si ¿mi hijo tiene dislexia?
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Te dejo el video donde explicamos un poco más a fondo todo esto:
