Cada etapa en el desarrollo de cualquier niño suele tener un miedo asociado a él. Tener miedo es una emoción natural que llegado el momento todos podemos experimentar. No obstante, hay una gran diferencia entre miedo y fobia. Si quieres saberlo, te recomendamos que escuches nuestra intervención en onda cero sobre el tema.
El miedo a la oscuridad es uno de los más comunes entre los 3 a los años, si a los 9 años continua teniéndolo, quizás es un buen momento para valorar si se ha convertido en fobia a la oscuridad. Es necesario saber diagnosticarlo a tiempo para tratar el problema de forma adecuada y los 3 indicadores que van a poder sacarte de dudas es saber:
- Cómo de intenso es el miedo de tu hijo
- Las consecuencias que tiene en su vida diaria
- Cuanto tiempo lleva padeciéndolo.
Vamos a poner un ejemplo, si cada vez que tu apagas la luz tu hijo vive la situación de una forma angustiosa,grita en exceso, se vuelve histérico, lo evita a toda costa y jamás quiere ir a dormir a casa de un amigo o deja de ir a los sitios sólo por no quedarse a dormir, quizás debas consultar con un especialista. En el Superpapis de esta semana,te vamos a dar a pautas que ayudarán a tu hijo a que supere el miedo a la oscuridad.
¿Qué puedes hacer para que supere el miedo a la oscuridad?
Deja las amenazas: Desde Ayudarte nunca estamos de acuerdo con las amenazas, pero entendemos que hay muchos momentos en que nos superan la situaciones y para ello recurrimos al miedo para que nos obedezca. Los clásicos “ Duérmete pronto que viene el coco” te servirán para que de forma puntual se duerma pero generaran en él un problema que igual no tenía. Hay que tener cuidado con las cosas que decimos y los seres fantásticos de los que le hablamos, sobretodo porque es probable que consigamos nuestro objetivo a corto plazo pero lo que le habremos enseñado es que haga las cosas por miedo a lo que le pueda pasar y no porque haya comprendido nada.
Consigue que el miedo sea un aliado y un enemigo: Es muy habitual utilizar el 
miedo para evitar explicaciones sobre las cosas o tratar de que cambie su comportamiento. Incluso en las canciones más tradicionales aparecen frases como: “Duérmete niño, Duerme te ya o viene el coco y te comerá”. Todo eso, lejos de ayudarle va a fomentar que esté aún más angustiado. Antes de compartir esas canciones o de inventarte monstruos para que te ayuden porque de pequeño a ti te lo hacían y no te pasaba nada, dale una explicación adecuada y convierte lo que nos da miedo en un juego: sombras chinescas, juegos en los que está tocando los objetos pero no los ve….
Establece una rutina antes de que se vaya a la cama: En cualquier problema las rutinas son esenciales para dar seguridad al niño y le preparan para lo que va a venir. Así que las cosas que hacía tu madre como cantarte una canción o contarte un cuento van a ser primordiales para ayudar a que se tranquilice y se duerma más fácilmente.
Si tiene miedo tranquilízalo sin encender la luz.
Quizás es algo que no te hayas 
parado a pensar pero si cada vez que el tiene miedo, enciendes la luz. Sin pretenderlo, tu hijo empezará a asociar la luz a algo positivo, algo que le ayuda y le protege de su miedo y la oscuridad a algo malo. Todo eso, conseguirá fomentar más su idea de que en la oscuridad ocurren cosas malas.
Ahora nos toca saber tu opinión, ¿tu hijo tiene miedo a la oscuridad y no sabes cómo actuar?, ¿qué juegos conoces para poder emplear a convertir el miedo en aliado?
]]>
