todas las personas suman para detener el bullying. ¿Qué hacer si mi hijo sufre acoso escolar?: Antes de saber si tiene un problema, es importante saber qué es y que no es el acoso y los tipos de acoso que pueden sufrir los niños. En ocasiones, proyectamos nuestra propia infancia en la suya. Pero ¿se considera acoso escolar ponerle un mote a alguien? ¿Y si tu hijo no quiere jugar con otro? Muchas son las dudas que pueden surgir frente a este tema y es importante tener conceptos claros para saber actuar adecuadamente. Por eso, en este artículo resumimos lo más importante. Mitos sobre el acoso escolar: Muchas de nuestras ideas inciden negativamente para enterarnos verdaderamente del problema y poder afrontarlo: son cosas de críos, sería el primero en enterarme si mi hijo sufriera acoso escolar, no hay que ser chivato… Estas y otras concepciones escuchamos en el estudio cada día, por eso es importante dejar de inculcar a tus hijos esos prejuicios que no van a ayudarles cuando más lo necesiten. Lo primordial que se debe saber es que cualquiera puede sufrir acoso escolar y cualquiera puede hacer algo para parar esa situación, por eso es importante que si tu hijo sufre acoso sea capaz de contarlo a un adulto y pedir ayuda. Detecta el bullying en clase: Una de las primeras personas que va a detectar que hay un problema es el profesor de tu hijo. Es el único adulto que va a estar en el escenario dónde sucede y en el que confías para que sea la persona que maneje esa situación. Sin embargo, muchas veces pasa inadvertido o no parece ser tan claro. Este es un excelente artículo para  ofrecer herramientas que puedan ayudar a los docentes en esa tarea. Recursos para el docente en clase y para los padres: ¿Cómo poder hablar con tu hijo o con alumno sobre el acoso escolar sin caer en los tópicos? Lo más importante es ofrecerle material visual como vídeos cortos para concienciar sobre este problema o comentar en clase que  historias reales con las que se puedan sentir identificadas. Por esa razón, en este artículo encontrarás un cuento que puede ser un buen comienzo para iniciar una conversación sobre el acoso y saber cómo se posicionaría si le pasara y que alternativas haría él en un caso similar. ¿Cómo saber si mi hijo es un acosador?: Es una pregunta muy temida por muchos padres, sin embargo, lamentablemente para que exista una víctima tiene que haber un acosador como mínimo. Evitar el problema no va a hacer que no exista, todo lo contrario. Es necesario que tengas conocimiento de ello para tratar de ponerle solución cuanto antes y que tu hijo reciba la ayuda que necesita para enfrentarse a sus problemas y saber otras alternativas para canalizar sus emociones. Aunque la teoría es fácil, somos conscientes de todos los retos que plantea asumirlo, por eso, conviene que lo creas o no, leas este artículo. Quizás tu hijo no es un acosador, pero conoces que lo sea y puedas ayudarle. ¿Cómo se puede defender mi hijo de un acosador?: Hay muchos consejos para conseguir enfrentarse al acoso escolar, hay padres que predican el ojo por ojo y diente por diente y otros simplemente hablan de alejarse. No obstante, cuando convives más de 6 horas diarias con la persona que se burla de ti, es complicado. Por eso, en este artículo te enseñamos formas útiles para lograr defender tus derechos sin utilizar violencia ni dañar a los demás. Cuando se presentan este tipo de problemas, la comunicación es clave para lograr solucionarlo. Muchas veces, no saber cómo responder ante ciertas burlas o desplantes genera que el problema se vaya agrandando. En otras ocasiones, llega a ser tan grave que es necesario notificarlo en el colegio. No obstante, nos parece esencial poder ayuda a tu hijo a comunicarse de forma asertiva. Además, te proponemos juegos que puedes realizar en casa para fomentarla en casa en nuestro artículo 3 juegos para fomentar la asertividad en casa. ¿Por qué hablan de la importancia de los espectadores?: Puede que tu hijo no sea la víctima de un acoso o el agresor que está generando todo ese conflicto, pero es importante concienciar a tu hijo de que actúe contra el acoso. No para que se meta en líos, sino para fomentar empatía, resolución de conflictos… Uno no puede hacer mucho pero entre todos, el acoso escolar puede pararse. No sirven excusas, ni decir que deje de meterse en líos. El acosador deja de actuar cuando no hay nadie que mire lo que hace. Es vital que todos entendemos que todos somos capaces de ayudar y que mirar hacia otro lado sólo generará más dolor. Si tu ves a alguien solo y no te acercas, formas parte de la rueda del acoso. Justamente esa es la base de la mayoría de los programas exitosos que se están implantando en Finlandia y en el resto de países que han conseguido reducir sus tasas de acoso escolar. ¡Únete a ellos y foméntalo en tu hijo! Esperamos que hayas disfrutado de nuestra selección de artículos y hayas aprendido mucho más sobre el bullying, pero si sigues teniendo dudas, compártelas en la parte de comentarios y te ayudaremos ;)]]>